No se agüiten que hay chapo pa ́ mas. Emociones, performatividades y necropolítica: los corridos tumbados y bélicos en el acontecer subjetivo y social de las juventudes del COBACH 11 de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.
Resumen
Esta investigación examina cómo los corridos tumbados y bélicos operan como dispositivos de subjetivación entre juventudes de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, configurando emociones, imaginarios de poder, prácticas de consumo y performatividades de género en un contexto atravesado por desigualdad estructural, militarización y capitalismo afectivo. A partir de una Investigación Participativa Crítica desarrollada en el Colegio de Bachilleres Plantel 11—con 77 encuestas, cuatro grupos focales, diez entrevistas en profundidad y una observación participante sostenida—el estudio analiza cómo estas músicas se convierten en gramáticas sensibles que enseñan qué sentir, a quién temer, qué consumir y cómo encarnar género y poder.
Los hallazgos muestran que los corridos tumbados y bélicos funcionan simultáneamente como catarsis emocional, pedagogía necropolítica, aspiración de movilidad social y guion patriarcal, articulando así un entramado donde tristeza, violencia, hiperconsumo y masculinidades beliconas se vuelven mercancía afectiva. Sin embargo, en las mismas letras que glorifican el narco lujo emergen fisuras: silencios, gestos y acordes que revelan cansancio, vulnerabilidad y deseos de cuidado comunitario. Las juventudes no consumen estas narrativas de forma acrítica: negocian, reescriben y disputan sentidos en una ecología mediática gobernada por algoritmos que administran la melancolía y la dopamina.
Ubicado en el triángulo Chiapas–San Cristóbal–Cobach 11, el estudio demuestra que los corridos tumbados y bélicos no son simple banda sonora, sino infraestructura emocional y política que conecta la biografía juvenil con la necropolítica regional y la lógica global del capitalismo gore. La tesis concluye que escuchar estos corridos exige atender de manera rigurosa cómo operan estas tecnologías del yo —modelando sensibilidades, deseos y percepciones— y, al mismo tiempo, reconocer las grietas que los atraviesan, donde emergen tensiones, vulnerabilidades y posibilidades críticas que permiten imaginar futuros sensibles alternativos y otros modos de habitar la vida en común.
This research examines how corridos tumbados and corridos bélicos operate as machines of subjectivation among youth in San Cristóbal de las Casas, Chiapas, shaping emotions, power imaginaries, consumption practices, and gender performances within a context marked by structural inequality, militarization, and affective capitalism. Drawing on a Critical Participatory Research approach carried out at the Colegio de Bachilleres Plantel 11—with 77 surveys, four focus groups, ten in-depth interviews, and sustained participant observation—the study analyzes how these musical genres become sensitive grammars that teach what to feel, whom to fear, what to consume, and how to embody gender and power.
Findings show that corridos tumbados and bélicos simultaneously function as emotional catharsis, necropolitical pedagogy, aspirations for social mobility, and patriarchal script—producing an assemblage where sadness, violence, hyperconsumption, and militarized masculinities become affective commodities. Yet within the same lyrics that glorify narco-luxury, cracks emerge: silences, gestures, and chords that reveal exhaustion, vulnerability, and desires for community care. Youth do not consume these narratives passively; they negotiate, reinterpret, and dispute meaning within a media ecology governed by algorithms that modulate melancholy and dopamine.
Situated within the Chiapas–San Cristóbal–Cobach 11 triad, the study demonstrates that these corridos are not merely a soundtrack but an emotional and political infrastructure that links young people’s biographies to regional necropolitics and the global logic of capitalismo gore. The thesis concludes that listening to these corridos requires a rigorous examination of how these technologies of the self operate—shaping sensitivities, desires, and perceptions—while also acknowledging the fissures that cut through them, where tensions, vulnerabilities, and critical possibilities emerge, opening space for imagining alternative affective futures and new ways of inhabiting communal life.

