El insólito caso de Máximo y Bartola. Las diferencias humanas en el imaginario del siglo XIX
Resumen
A mediados del siglo XIX viajaron por Europa como parte de un espectáculo público dos jóvenes americanos conocidos médicamente como “microcéfalos”. Más común que en la actualidad, la exhibición de enanos, siameses y gigantes en las ferias y circos despertaba la curiosidad de un público ansioso por conocer los entresijos de continentes lejanos y excitantes como África y América. Con un imaginario ávido de lo exótico, donde se creía que fieras amazonas se escondían en las selvas tropicales y que existían ciudades perdidas de oro y plata, estos microcéfalos fueron atrapados por el hambre de conocer la naturaleza y el pasado del hombre americano que sin diferencias se calificaba como azteca. En este contexto se ubica el folleto titulado Memoir of an Eventful Expedition in Central America; Resulting in the Discovery of the Idolatrous City of Iximaya, in an unexplored region: and the possession of two Remarkable Aztec Children, Descendants and Specimens of the Sacerdotal Cast (now nearly extinct) of the Ancient Aztec Founders of the Ruined Temples of that Country, Described by John L. Stevens, Esq., and other Travellers. Translated from the Spanish of Pedro Velasquez of San Salvador. Se trata del relato de una incursión al corazón de Guatemala donde existía una ciudad perdida que preservaba costumbres milenarias intocadas por la mano española y una casta genuina azteca.